La ardilla es, sin duda, el mamífero más directamente ligado a los bosques de pino blanco en Collserola. Se trata de una especie con un papel importante dentro de la cadena trófica de estos ambientes, tanto por su predación sobre las piñas como para ser una posible toma de otras especies forestales, como el azor o la jineta. En este sentido, es también un indicador del estado de salud de este sistema forestal y de los diferentes impactos y perturbaciones que recibe.
Desde el año 2000, se lleva a cabo un seguimiento mensual de la población mediante la observación directa en itinerarios forestales, con una clara tendencia regresiva detectada a lo largo de estos años.
(*) Estudio realizado con colaboración externa